Por Mauricio Álvarez Mora.
El pasado 16 de febrero, en varios distritos del cantón de San Ramón, otro plebiscito demostró que cuando se le da la palabra, el pueblo sabe usarla bien.
En este distrito, 15 granjas porcinas y 20 granjas avícolas son causa de malos olores y afectación de las fuentes de agua. Y por esto la población se aremangó y metió mano en el asunto.
Porque en enero del 2000, los regidores de la Municipalidad de San Ramón habían aprobado suspender la entrega de permisos a nuevas granjas, hasta tanto no estuviera listo el Plan Regulador. Sin embargo, los dueños de estas nuevas granjas lograron que la Municipalidad echara para atrás.
Pero con la decisión del plebiscito no hay vuelta de hoja. El 84% de los vecinos (281) votaron para que, hasta que esté listo ese Plan Regulador, la Municipalidad no pueda aprobar ni un permiso más.
Esta consulta se suma a otra similar, en el distrito de Piedades Sur, también en San Ramón, celebrada el año pasado, y en la cual la población se manifestó de la misma manera.
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