Por Mauricio Alvarez Mora.
En el marco del Encuentro Mesoamericano “Defensa de los Territorios Indígenas, frente a las industrias extractivas (exploraciones y explotaciones mineras y petroleras) y represas” desarrollado del 18 al 20 de febrero 2009 en Ciudad Guatemala, los indígenas exigieron de manera urgente a las autoridades nacionales, la Aprobación de la moratoria y suspensión de licencias y operaciones mineras, hidroeléctricas, petroleras y otras empresas extractivas que se están ejecutando en aquellos sitios, territorios indígenas o comunidades locales.
En la declaración de Iximulew (Guatemala) los representantes indígenas “rechazaron las políticas sobre exploración y explotación de los recursos naturales y del subsuelo, principalmente por las aceleradas y arbitrarias medidas adoptadas por las autoridades nacionales, que violan los procesos de consulta y el consentimiento previo, libre e informado de los pueblos indígenas, frente a sus prioridades de desarrollo y han puesto en riesgo la vida, los bienes naturales, los recursos hídricos, la biodiversidad y los derechos sobre las tierras, territorios y recursos de los pueblos indígenas y comunidades locales”.
Al encuentro asistieron mas de 80 líderes de los Pueblos Indígenas afectados por la industria extractiva y represas en Mesoamérica, dirigentes de las Redes Indígenas Regionales, así como representantes de entidades sociales, ambientales, académicas y redes como Oilwatch Mesoamérica.
Los pueblos indígenas que asistieron: “instaron a la opinión pública a apoyar las demandas y luchas, a fin de determinar y hacer visible los grandes daños y costos ambientales, económicos, sociales y culturales, que las empresas extractivas y mega-represas realizan en nuestros territorios y que han generado más desigualdad y extrema pobreza, así como división entre nuestros pueblos, de igual manera a visibilizar los escasos beneficios que están dejando y dejarán a los países en las actuales condiciones legales y contractuales”.
Es un avance contra los mega proyectos pues hay un acuerdo unánime por la resistencia a este tipo de proyectos que están generando un nivel de conflictividad mayor al de las guerras civiles en la región. Pudimos ver que son cientos de proyectos sobre comunidades indígenas y que se están violando todos los derechos humanos fundamentales.
Esta actividad fue organizada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) junto con las Redes Indígenas Regionales: Consejo Indígena Centroamericano (CICA), Coordinadora Indígena Mesoamericana (CIMA), Coordinadora Indígena Mesoamericana y el Caribe (CIMCA) y la Red Latinoamericana de Mujeres Indígenas sobre Biodiversidad.
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