Refinería nos atrasa y amarra por décadas

Mejor ahorrar, trasformar, sustentar y movilizar

Por Mauricio Alvarez Mora.

La vieja refinería nos “casó” con el petróleo por casi 50 años, ¿cuántas décadas más lo haría una nueva refinería, cuando el uso y las existencias de petróleo están en cuenta regresiva?, nos preguntamos ante el proyecto que vio la luz con el establecimiento de relaciones con China y su indisoluble unión al interés de la explotación petrolera en nuestro país, pactado en un desconocido acuerdo con la compañía estatal (CNPC) en 2007.

Muchos costarricenses se sienten decepcionados de un gobierno “de cambio” que quiera resucitar una refinería que podría retrasar el modelo post-petrolero de energías limpias y entraría en contradicción con la imagen de una Costa Rica verde y carbono neutral, tan cacareada a nivel internacional, y poner en entredicho nuestro liderazgo y legitimidad ganadas con la moratoria a la exploración petrolera.

Y sobre la inclusión de agro-combustibles en el proyecto, presentado por el gobierno como un aspecto positivo y en armonía con el ambiente, desde el ecologismo hemos advertido que no hay un marco legal que asegure que no compitan con la tierra para la producción de alimentos que ponga en riesgo nuestra seguridad alimentaria, como actualmente sucede con la piña y otros monocultivos.

Además, ya la construcción de un megaproyecto para refinar petróleo ha desatado polémica por dudas financieras, legales, ausencia de licitación, sumado a juicios, investigaciones, falta de transparencia y de información y un cuestionado proceso de evaluación ambiental. Cambiar fue el mandato del pueblo para el gobierno actual, no remendar ni maquillar proyectos tan cuestionables.

Ahorrar. No vale defenderlo por la inversión hecha hasta el momento, cuando ya amarrados, el costo sea mayor y no podamos hacer nada ante un inminente encarecimiento de combustibles fósiles por la sabida escasez de petróleo. Con esta inversión no habría interés de ahorrar o modificar el consumo o introducir cambios necesarios en la matriz energética hasta que se acabe el petróleo en pocas décadas, al mismo tiempo que será el incentivo perfecto para abrir la puerta a la extracción de gas y petróleo que viene amarrado desde siempre para garantizar la factibilidad futura del proyecto.

Transformar. Antes de apostar por supuesta gasolina barata, el país podría apostar por mejorar condiciones de transporte e infraestructura. Lo barato hoy sale caro mañana, un estudio de la UNA calcula, en casi 250 millones de dólares, las externalidades o costos socio-ambientales asociados a las ineficiencias de infraestructura urbana y del sistema de transporte: accidentes de tránsito, congestión en tiempo y consumo de combustible y contaminación (Otoya, 2009).

Sustentar. Sigue pendiente una gran agenda donde está el mayor consumo y desperdicio del petróleo, urge hacer “potable” la ciudad con soluciones posibles y al alcance de decisiones políticas como los son la aceleración y aplicación del proyecto de un tren eléctrico interurbano, exoneración de impuestos transportes eléctricos e híbridos o aparatos de bajo consumo, la incentivación de la producción de energía solar y fortalecer las campañas de educación sobre ahorro y consumo.

Movilizar. Si no hay respuesta ciudadana, lo que continua es un libreto conocido: un estudio de factibilidad maquillado a la medida, una viabilidad ambiental aprobada de antemano entre telones, torceduras y afinamiento para la orquestación de voluntades de individuos y de instituciones, y quienes cuestionemos y propongamos otras rutas tendremos nuevamente el papel de héroes o villanos, según se logre moldear la opinión pública y judicializar el desenlace.

Por la visita presidencial a China, la donación y explicaciones de Recope parece que, al igual que en el caso de APM Terminal, la nueva refinería ya tiene viabilidad política, antes de saber si es viable en términos ambientales, sociales y económicos.

Ante este panorama nos preguntamos si tiene sentido ir a sentarnos a una mesa de diálogo de combustibles cuando ya este proyecto lleva el visto bueno y define la política energética de las próximas décadas?

Publicado en: https://www.diarioextra.com/Noticia/detalle/251091/refiner-a-nos-atrasa-y-amarra-por-d-cadas